Pues ya lo tenemos aquí...
El nuevo -y muy anhelado- disco de los Ben Folds Five. Con todos ellos: Ben Folds, Robert Sledge y Darren Jessee... trece años después... "The Sound of the Life of the Mind".
Y debo reconocer que la primera escucha emociona, sobre todo por oir de nuevo los coros y el superbajo de Sledge -no se entiende el grupo sin ese sonido- y la batería de Jessee tras las inconfundibles melodías de Folds...
En los últimos años en solitario de Ben Folds he seguido su carrera como un acólito fiel. Le perdonaba sus bromas, transigía con casi todo lo que me ofrecía, perdonándolo por aquellas genialidades de cuando formaba parte del grupo. Y compraba religiosamente todos sus discos, proyectos y ocurrencias...
Así que imaginaos la alegría al saber que la banda se reunía de nuevo, que Ben aparcaba su ego para volver a componer junto al grupo. Todo volvería a ser como antes...
Y sí... casi todo es como antes. Sin ser el mejor disco de los BFF este "The Sound of the Life of the Mind" tiene pedazos que podrían pertenecer perfectamente a los grandes momentos de la banda. "Michael Praytor, Five Years Later" nos trae sonidos de aquella época y la rotunda "Do It Anyway" parece querer recoger esa actitud chulorebelde de antaño con un estribillo atrevido, y melodía de las de siempre, de las del grupo, una canción que merece estar entre sus mejores; "Sky High" retoma la faceta de baladas y es una canción muy bien hecha, muy bien compuesta, firmada por Darren Jessee y con aires lejanos de aquella "Brick" espectacular. Otra canción a destacar es la que da título al disco, un tema emocionante, lleno de fuerza y cierto encanto, sin olvidar "Hold That Thought" y una fantástica "Draw a Crowd", con su letra ácida y sucia muy Foldsfiveana, con coro de los de antes. Buenos temas, que serían singles en cualquier otro disco de cualquier otra banda mucho más mediática...
Sí. Son los Ben Folds Five y, en ese sentido, volvemos a tener a nuestro lado al grupo amigo. Esa es la buena, buenísima noticia. Todos están en casa, todo como antes... y es un discazo, aunque parezca levitar sobre él una extraña sensación -leve, eso sí- de que la música tiene su momento y su lugar.. porque el grupo siempre tuvo una frescura arrogante y característica en las melodías y un espíritu rebelde y casi punk en las letras; y ahora las composiciones parecen sentir un poco el peso del tiempo, como si estos trece años separados les hubiesen envejecido, sobre todo a Ben Folds (...lógicamente ha sido así...).
Pero siguen siendo ese grupo de canciones inspiradas e inspiradoras, geniales e irrepetibles, y oirlos de nuevo, como os he dicho, emociona. Porque es uno de nuestros grupos, porque su música es una sensación familiar, cercana. Y es bueno volver a escuchar las melodías tan características, esos coros... y se nota que están casi como en casa y que en cierto modo, han vuelto, quizá un poco entumecidos, pero de vuelta... porque este grupo, lesionado y con la mitad de su inspiración, es mejor que el noventa por ciento de las bandas actuales en pleno rendimiento... porque un disco normal de esta gente, todos juntos, es inalcanzable para otros muchos...
Una de las mejores noticias musicales del año... el retorno de los grandes Ben Folds Five con su "The Sound of the Life of the Mind"... todos estamos de enhorabuena...
Do It Anyway
Michael Praytor, Five Years Later
Draw a Crowd
Sky High
Que lo disfrutéis...