Debe ser muy dificil hacer un disco después de una auténtica obra maestra. Y más si el anterior también era un trabajo de matrícula. La exigencia debe ser mayúscula...
Pues algo así habrá tenido que sentir el genial Joel Alme...
Su primer disco "A Master of Ceremonies" (2008) era un auténtico lujazo, un debut espectacular lleno de bellísimas canciones pop que cautivan desde la primera hasta la última.
En el segundo disco se espera que el artista esté a la altura del primero como mínimo. Pero no. El sueco sacó su mejor arte y se marcó un "Waiting for the Bells" (2010) que aún, a día de hoy, sigue siendo, no sólo uno de mis discos favoritos, también uno de esos trabajos a los que uno vuelve una y otra vez... Una auténtica maravilla del pop, uno de esos discos imprescindibles que nunca saldrán en las listas de los mejores porque el muchacho no es demasiado mediático, pero que merecería estar en ese podio sin duda alguna. Imaginad mi expectación por su siguiente largo...
Y en Mayo nos llegó su tercer trabajo: "A Tender Trap". Y cubre, de sobra, todo lo esperado...
El crooner sueco nos regala su arte en diez temazos, quizá menos densos que en su anterior trabajo, pero igualmente de una calidad exquisita y elegante, en los que los arreglos siguen siendo casi perfectos, incluso con mayor riqueza y matices en este caso.
Sigue teniendo protagonismo el piano, pero esta vez esta más acompañado, más coloreado, con más instrumentación, con ese tono general más optimista que tiene el álbum, aspecto que se nota hasta en la propia voz, en la forma de interpretar las canciones, que aún así, siguen teniendo ese puntito de melancolía de las canciones pop bien hechas, las de toda la vida.
En definitiva "A Tender Trap" se une a la colección de canciones magistrales del sueco Joel Alme con la misma nota alta de sus discos anteriores. No sólo no defrauda... nos deja con ganas de más...
Que lo disfruteis...